Una tarde negra de Colombia en su visita a La Paz, Dato #3 [ARTICULO]


Una tarde gris fue la que vivió la Selección Colombia en su visita a La Paz, y es la única derrota que nuestro equipo tricolor ha vivido en la altura, ese día Bolivia era una máquina, era una aplanadora, ese día derrotó por 4-0 a nuestro equipo ese fatídico 10 de Septiembre de 2003.

Colombia alineó ese día con Oscar Córdoba; Ivan Ramiro Córdoba, Mario Yepes, Roberto Carlos Cortes, Gonzalo Martinez; Fabian Vargas, Giovanni Hernandez, John Viafara, Jairo Patiño; Juan Pablo Ángel y Victor Aristizabal y el técnico era Francisco Maturana. Fue un partido extraño para Colombia, parecía como si le pesaran las piernas a los jugadores, era como si la altura, la temida altura si les estuviera surtiendo efecto, los bolivianos por su parte hicieron lo que debían hacer, ahogar al equipo visitante y hacerse grande y así lo dejó en claro, pues tempranamente la defensa tricolor cometió un penal que cobraría Julio Cesar Baldiviseso, el hoy técnico de Bolivia y se convierte en el primero en enfrentar a Colombia como director técnico y como jugador y ojo, ya le ganó en esa negra tarde que muchos recordaremos, pero continuemos con su cintilla de capitán Baldivieso le pegó duro al balón y al centro y anotó el primero para la cuenta verde y ahí, en ese penal comenzó a desmoronarse el plateo táctico de nuestro equipo y se crecería el jugador que terminaría de amargarle la tarde a los colombianos, Joaquin Botero.

Así es, Joaquin Botero sería el verdugo de la visita, pues sería el quien terminaría con la esperanza colombiana al anotarle un hat-trick y el primero sería a los 27 minutos en un pase de costado que el boliviano no desaprovecharía y dejaría la primera mitad con un 2-0 a favor, pero la segunda parte de este partido no sería nada distinto, volvería Botero para el tercero, con un error de Oscar Córdoba al regalar el palo izquierdo y por ahí, sin pensarlo enviaría el balón aquel habilidoso jugador, dejando las cifras 3-0 al minuto 49', iniciando el partido en ese complementario, y a los 10 minutos llegaría el 4-0 de cabeza, de Botero nuevamente, que se filtró entre los centrales y recibió un centro exquisito y dejó nuevamente a Córdoba sin excepciones y así terminaría el partido, pero sufrió hasta el último minuto, porque el partido pudo ser mas abultado en esa negra tarde que muchos de los que estaban en ese campo jamás olvidarán.



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